Las autoridades sanitarias indicaron que la realización de exámenes preventivos es la mejor alternativa para detectarlo a tiempo
Un aumento de 33% en el número de casos de tumores malignos del cuello del útero en mujeres poblanas detectó la Secretaría de Salud estatal durante el primer bimestre del año, con 12 casos, en comparación con los nueve reportados el año pasado en el mismo periodo.
A nivel nacional, el Boletín Epidemiológico del Sistema Nacional de Vigilancia de la Secretaría de Salud federal reportó que Jalisco junto con Veracruz encabezaron la lista con 53 casos, seguido de Oaxaca con 49, Sinaloa con 37 diagnósticos y Guanajuato junto con Estado de México con 36 cada uno.
Con base en los especialistas médicos, el Virus del Papiloma Humano (VPH) es la principal causa en el 95% de los caso de tumores malignos del cuello uterino.
Advirtieron que todas las mujeres corren el riesgo de que una infección por VPH se vuelva crónica y que las lesiones precancerosas evolucionen hacia un cáncer de cuello uterino invasivo.
MEDIDAS PREVENTIVAS
Cada 26 de marzo se conmemora el Día mundial de la prevención del cáncer del cuello uterino y tiene como objetivo generar conciencia en las mujeres sobre las acciones de prevención, así como el diagnóstico oportuno.
Los especialistas médicos señalan que a través de una revisión constante se tienen mayores posibilidades de recuperación y mejor calidad de vida, con lo que se podrán revertir las cifras, que cada vez cobran más vidas a nivel mundial.
En ese sentido, Eduardo López Villalobos, coordinador de la Clínica Médica de la UPAEP, dijo que cualquier tipo de cáncer es tratable si se detecta a tiempo. Esto es algo que todas las personas saben, no obstante, las personas no se realizan exámenes periódicos para descartar cualquier tipo de enfermedad.
En el caso del cáncer en cuello uterino, lo recomendable, dijo, es la vacuna contra el Virus del Papiloma Humano (VPH),
De igual manera, expresó que es necesario hacerse de manera periódica estudios de tamizaje para detectar de manera temprana si existe alguna lesión precancerosa en el cuello uterino, como el papanicoláu o citología cervical y la prueba del VPH.
Destacó que, en este tipo de cáncer, los signos de alerta aparecen cuando se encuentra en una etapa avanzada por lo que, si se tiene sangrado entre periodos menstruales o después de tener relaciones sexuales, así como también si hay aumento de flujo vaginal o dolor pélvico durante el acto sexual, se recomienda acudir al médico.
Comentó que el tratamiento como en todos los tipos de cáncer dependerá de la fase en la cual se detectó y del paciente con sus antecedentes médicos.