Este montículo se llamaba en náhuatl Amacueyatepec. Luego cambió el nombre, pues se construyó la ermita de la Virgen de Loreto, tras que José de la Cruz Sarmiento, indígena de la Resurrección, sobreviviera a la caída de un rayo, en 1655, al encomendarse a la imagen; pidió permiso para la edificación, según recopila el investigador Érik Chiquito Cortés (UNAM).
Foto: cortesía de Luz del Carmen Brito y Puebla Antigua