Con medidas de seguridad como toma de temperatura, uso obligatorio de cubrebocas y aplicación de gel antibacterial, la armadora Volkswagen capacita a sus empleados para la llamada “nueva normalidad”.
En un comunicado oficial, el Sindicato Independiente de Trabajadores indicó que acordó con la representación patronal aplicar pruebas rápidas de detección de coronavirus a todo el personal que se reintegre.
El regreso a labores solo es del 30 por ciento de la plantilla, indicó el gremio.
La toma de asistencia deja de ser por medio de checador electrónico para evitar el contacto físico y los trabajadores podrán cambiarse de ropa a la salida evitando llevarla a sus casas, sostuvo la dirigencia sindial en el mensaje difundido.