Por: Jaime Carrera
Los paisajes que brinda durante diciembre la Sierra Norte de Puebla esconden paz, calma y tranquilidad, con atardeceres que reblandecen las corazas de la piel más áspera.
A Basta con un recorrido en lancha por la presa de la localidad de Tenango de las Flores en Huauchinango o una caminata por el cerro de La Tabacalera, en Xicotepec, y rezar a una Virgen de Guadalupe monumental de 23 metros de altura, para reconectar con lo elemental.
No hay mejor época para visitar estos pueblos mágicos que durante el cierre de cada año, pues ofrecen añorantes paisajes, entre cerros, neblina, flor de Nochebuena y agua contenida en presas que acompañan el arbolado paisaje a su alrededor.
En Tenango, los pasillos de flores dotan de color las calles y el mercado municipal, entre azaleas, gardenias, hortensias, violetas y tulipanes, así como nochebuenas, que contrastan con el sol reflejado sobre el agua contenida en la presa, donde se grabó la película Tizoc de 1957 con Pedro Infante.
“Contrario a lo que piensa mucha gente, en Tenango de las Flores sí hay competencia con Atlixco, representamos una oferta floral muy amplia en la Sierra Norte, y estamos muy orgullosos de la calidad de nuestras plantas, más de la Nochebuena en esta temporada”, compartió Irene Velázquez, comerciante de la zona.
Los mariscos y comida típica de la región terminan por brindar una experiencia culinaria idónea, para disfrutar con la familia o amigos, previo a adentrarse en tramos con árboles que tocan el cielo, para avanzar unos 14 kilómetros más adelante a Xicotepec de Juárez.
A pie o en vehículo, guadalupanos arriban al cerro de La Tabacalera; desde kilómetros atrás ya se ve la imagen religiosa a la intemperie más grande del mundo: una virgen de Guadalupe monumental, en la que hasta hoy se afinan los últimos detalles para su festejo el 12 de diciembre.
“Este 2021 habrá una gran fiesta”, señala Rufina López, tras pedir a los guadalupanos a mantener todas las medidas preventivas de contagios de coronavirus, pero que emocionada dice esperar a más de 15 mil personas que celebrarán a la Virgen de Guadalupe.
Al interior del recinto, se resguarda la piedra en donde apareció esta virgen en el año de 1949, protegida en una vitrina a la cual los creyentes van a orar como acto de fe y agradecimiento por sus milagros.
Así, como una ruta de naturaleza, fe y gastronomía, es como los pueblos mágicos de Huauchinango y Xicotepec de Juárez reciben a los turistas en esta época, entre flores, neblina y el fervor hacia una de las vírgenes de Guadalupe más grande del país.