Hace un año, por estos días, se iniciaban las tradicionales reuniones para brindar con amigos o compañeros de trabajo por las fiestas decembrinas.
La pandemia de coronavirus lo cambió. Hoy tiene contra la pared a las empresas de banquetes, que daban trabajo a 30 mil personas, que organizan las celebraciones en centros nocturnos, salones de fiestas o jardines.
La Asociación de Banqueteros de Puebla informó que 15 negocios del sector han quebrado por la crisis sanitaria.
Por ello, 400 afiliados piden regresar a la actividad de eventos sociales para evitar más cierres definitivos de establecimientos y recuperar algo de lo perdido, en la recta final del año.
María Fernanda Cruz, presidenta de la asociación, señaló que a las secretarías de Economía, Salud, la Dirección de Protección contra Riesgos Sanitarios y Protección Civil estatales se les entregaron los protocolos de higiene para llevar a cabo reuniones, que hoy no pueden rebasar las 10 personas.
A través de un video en redes sociales con el hastag #CuidarteEsNuestraNuevaTendencia, la asociación busca dar confianza a los clientes y garantizar que cuentan con las máximas medidas sanitarias para evitar contagios del virus.
La titular de la organización señaló que se busca el apoyo de la Secretaría de Turismo para la reactivación, así como la aprobación para realizar eventos de máximo 100 personas.
Fernanda Cruz detalló que la inversión para aplicar las medidas sanitarias depende del tipo de evento y la cantidad de personas, pero oscila entre los 5 mil y 25 mil pesos.
Los más solicitados son bodas y eventos empresariales de cierre de año o festejos que no se pudieron realizar desde marzo. Las graduaciones quedan descartadas por las grandes cantidades de personas que reúnen.
Las personas que deseen realizar sus eventos deben firmar y estar en conocimiento de las acciones sanitarias a las que deben someterse. El anfitrión de la fiesta deberá hacerse responsable de que sus invitados respetarán las indicaciones de sanidad.
Cubrebocas, careta, guantes y gel antibacterial son los utensilios básicos del personal que preste servicios para eventos. Hay protocolo para llegada de proveedores y hasta para recoger el último plato y mesa.
Cada paso está estudiado para tener un espacio de desinfección y evitar el contagio de los invitados.