Sin reactivación económica inmediata, líderes de comerciantes calculan la pérdida de 8 mil empleos en una semana.
Esa cifra se suma a los 42 mil puestos de trabajo cerrados en en el estado entre abril y junio, durante el cese de actividad para evitar contagios de coronavirus.
Antonio Prósperi Calderón presidente de la Canaco Puebla, indicó que las ocho mil plazas laborales se cerrarán en una semana porque el pago de nómina es insostenible para los empresarios. “Sin ingresos, es imposible”.
Explicó que la cifra puede aumentar porque aún hay patrones que resisten. Sin embargo, al llegar al límite, hay riesgo incluso de despidos colectivos.
Por su parte, el presidente del Consejo de Comerciantes del Centro Histórico de Puebla, José Juan Ayala Vázquez, informó que alrededor de 900 negocios quebraron en los últimos tres meses, debido a que no pudieron seguir con sus gastos de operación, lo cual se traduce en 3 mil 500 familias que se quedaron sin sustento.
De seguir sin una fecha de reapertura de negocios, detalló, a estos 900 se le sumarán otras mil compañías que no podrán abrir sus puertas cuando las condiciones viren el semáforo a naranja; se perderían otros 4 mil empleos.
Entre los negocios emblemáticos que cerraron cortinas se encuentra el Hotel Royalty, que cumple el centenario de funcionamiento con la liquidación de sus trabajadores y el plan de reabrir el próximo año.
También hay restaurantes tradicionales como “Los Farolitos o el “Café Plaza” y sucursales de Samborns o Soriana en cierre definitivo ante la falta de ventas.
NO HAY PLAN, ACUSAN
Los dos entrevistados reclamaron que no exista un plan de emergencia por parte de los gobiernos municipal y estatal, puesto que aunque sostienen reuniones con la alcaldesa de Puebla, Claudia Rivera Vivanco, no hay acuerdos prácticos y las discusiones se han alargado durante semanas.
Antonio Prósperi y José Juan Ayala explicaron que el lunes pasado la alcaldesa presentó un análisis del panorama económico del municipio, elaborado por la UNAM, sin un plan de reactivación económica, ni de apoyo o fecha tentativa de regreso.
“Yo creo que nos están haciendo esperar y esperar, porque llevamos semanas con estas reuniones pero están esperando a que el semáforo cambie; nosotros no podemos seguir así”, recalcó Ayala Vázquez.
Los líderes de comercios pequeños expresaron la urgencia de regresar de manera escalonada el regreso al trabajo, como lo han hecho otros municipios del país, puesto que lo que se quiere evitar es la pérdida de más empleos y agravar la situación económica y de pobreza que padecen miles de familias.