En medio de escándalos de abuso sexual contra menores, el Senado de la República aprobó por unanimidad reformas al Código Penal Federal para que los delitos sexuales cometidos contra menores de edad no prescriban.
Con ello no prescribirán los delitos de pederastia, abuso sexual, violación, corrupción de menores, pornografía infantil, turismo sexual, lenocinio y trata de personas, así como sus correspondientes sanciones.
La reforma contempla que si el delito lo comete un servidor público o ministro de culto religioso, además de las sanciones ya establecidas, se les castigará con destitución e inhabilitación para desempeñar cargo, comisión o cualquier otro de carácter público o similar, hasta por un tiempo igual a la pena impuesta.
En el caso de que el sujeto activo fuese servidor público, además de las sanciones señaladas, se castigará con destitución e inhabilitación para desempeñar el cargo o comisión o cualquiera otro de carácter público o similar, hasta por un tiempo igual a la pena impuesta.
También, las sanciones aumentarán al doble cuando la persona responsable tuviera para con la víctima alguna de las siguientes relaciones: patria potestad, guarda o custodia, ascendientes o descendientes sin límite de grado, familiares en línea colateral hasta en cuarto grado, tutores o curadores.
Ejerza una relación laboral, docente, doméstica, médica o cualquier otra que implique subordinación de la víctima, quien se valga de la función pública para cometer el delito, quien habite en el mismo domicilio de la víctima.
Cuando el autor emplee violencia física, psicológica o moral contra la víctima y quien esté ligado a la víctima por un lazo afectivo o de amistad, de gratitud o algún otro que pueda influir en obtener la confianza de ésta.
“Hoy ni una sotana, ni un cargo público, ni un fuero, ni un agresor sexual va a tener descanso y menos impunidad, ninguno, no importa si está en la escuela, en la iglesia en el club deportivo, en cualquier espacio donde están las niñas, los niños y los adolescentes, si es el padre, si es el tío, si es el hermano, si es el abuelo, no importa quién sea. (…) Nunca más, nadie más, ni uno más. (…) La impunidad es casi del cien por ciento. (…) Entendamos que el criminal es que debe responder y no la víctima. (…) Que no importa el tiempo que pase, habrá justicia”, expuso la presidenta de la comisión de Derechos de la Niñez del Senado, Josefina Vázquez Mota
Según cifras de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE) México ocupa el primer lugar en abuso sexual infantil. Aproximadamente 4 millones de niños y niñas han sido víctimas de este delito.
Se destaca que es alarmante que dentro de este contexto, ministros de culto en numerosas ocasiones son los autores de estos delitos.
Durante 2015 se registraron un total de 11,894 casos de abuso sexual; en 2016 fueron identificados 14,975; en el siguiente año se registraron un total de 15,826; en 2018 se contabilizaron 18,808 y para el cierre de 2019 se acumularon 21,407 casos, según estadísticas del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública. (La Crónica de Hoy)