La Cámara Nacional de la Industria Cinematográfica (Canacine) pidió a las autoridades sanitarias estatales considerar las salas de cine como espacios seguros y que les permitan reabrir. A través de un comunicado, Canacine aseveró que cuentan con estudios que arrojan que las salas de cine no son lugares de contagio de COVID-19.
Lo anterior, ya que el organismo argumenta ser una actividad que se realiza en silencio, con poca interacción social y donde es posible garantizar la sana distancia, gracias a las butacas entre las sillas vacías.
Por tanto, acusa que las autoridades las han agrupado “incorrectamente” al momento de determinar las medidas de ope ración de comercios y establecimientos, cuando inclusive es posible “cambiar el aire” de las salas varias veces por función.
Además, señala que la industria de exhibición cinematográfica ha sido una de las más afectadas de la pandemia con pérdidas de hasta 96%. Aseguró que en Corea del Sur, que tiene un enfoque masivo de monitoreo de casos, se observó que de 31.5 millones de asistentes a cines no hubo constancia de ni un solo caso de contagio a clientes o empleados.
La Canacine argumentó que mantener las salas de cine cerradas genera una percepción de ser lugares de riesgo de contagio, cuando no lo son, por lo que buscan salvar los empleos que generan. A la par de la carta, el organismo inició una campaña en redes con los hashtags #CineSeguro #Reactivarsinarriesgar #Somos EspacioSeguro.