Por: Cecy Rendón
Si ya tienes algo de dinero ahorrado y lo quieres invertir, pero no estás seguro de en qué o cómo, esta cápsula es para ti. Y si todavía no tienes el dinero ahorrado, comienza desde hoy y también toma nota.
Cuando comenzamos la aventura de invertir debemos estar conscientes de que cualquier inversión lleva un cierto grado de riesgo. Y debemos ser conscientes de ello no sólo a nivel racional, lo cual es muy fácil, sino también a nivel emocional, que es lo más difícil. Aprender a controlar las emociones durante todo el ciclo de nuestras inversiones es de lo más complicado.
Las inversiones más seguras y con menores o nulo riesgo te van a dar mucha paz mental y emocional, pero no te van a dar muchos rendimientos. Este tipo de inversiones son una buena idea como ahorro a largo plazo, o como un pequeño fondo para el retiro, pero no son la mejor opción si quieres que tu dinero verdaderamente se multiplique.
Aquí encontrarás seguros de ahorro, seguros de inversión, fondos de inversión bancaria a tasa fija, Afores, bonos de gobierno y básicamente todo lo que las grandes instituciones financieras te ofrecen.
Las inversiones de mediano riesgo tienen, como su nombre lo indica, algo de riesgo, pero te pueden dar rendimientos interesantes. Para que puedas aprovecharlas necesitas algo de conocimiento y estar dispuesto a aprender en el proceso, y por aprender me refiero a la teoría y los golpes de la práctica.
Aquí se encuentran los bienes raíces, las plataformas de inversión en bolsa a bajo o mediano riesgo, algunas monedas extrajeras y propuestas serias de negocios al alcance de tu monto de inversión.
Aclarando, inversión en negocios es cualquier negocio en el que tu no tengas que trabajar. De otra forma, si el negocio depende de tu trabajo para ser exitoso, estarás construyendo un autoempleo, no una inversión.
Potencialmente, las inversiones de alto riesgo te pueden dar grandes ganancias con relativamente poco dinero, pero el riesgo de perderlo todo es altísimo.
Mi recomendación es que nunca inviertas en negocios de alto riesgo, más que el dinero que te sobre; me refiero a dinero que no te importe perder.
Si ya tienes dominado el territorio de las inversiones de bajo y mediano riesgo, puedes aventurarte un poco en esta zona. Como alto riesgo califican básicamente las start-ups, todas las criptomonedas, paquetes de alto riesgo en la bolsa y muchas empresas tecnológicas.
Invertir no es ciencia nuclear, requiere aprendizaje, pero, sobre todo, que te apasiones por hacer crecer tu dinero para lograr tu libertad financiera. Y lo más importante: cualquiera, absolutamente cualquiera, puede aprender a invertir.