Por: Lic. Guillermo Pacheco Pulido
Es relativo
Aún no estaba en el vientre de su madre y ya era un ser mítico y un hombre sabio de todos los tiempos.
En sus estudios conoció y leyó los “libros sagrados”, se convirtió en el gran filósofo profundo y respetable, ejecutor de sus pensamientos y sus ideas.
Kung-Fu-Tzu o Confucio, creó el confucianismo como su sistema de ética, que no se debe confundir con confucionismo ni con confusionismo que se traduce o significa “oscuridad en las ideas o el lenguaje”.
En el libro Confucio, del autor Marco Antonio Gómez Pérez, nos dice al respecto que “el confucianismo es el principal sistema de pensamiento en China, desarrollado a partir de las enseñanzas de Confucio y sus discípulos y tiene que ver con los principios del bien, la sabiduría práctica y las propias relaciones sociales…”
“Su legado está lleno de sinceridad, bondad, amor, paz, armonía, música, integridad, humanismo, filosofía, libertad de pensamiento y acción, pero sobre todo y ante todo de verdad y virtud”.
La idea de justicia, de moralidad y sinceridad, culto a los antepasados, respeto a los mayores deben inspirar nuestras acciones y pensamientos.
El contenido de este legado fue su apoyo para entregar sus enseñanzas a sus alumnos y a la colectividad, para contestar a las preguntas que se le formularán, para construir; sus consejos y la totalidad de sus pensamientos. Todo ello lo hace que se considere uno de los personajes más importantes de la humanidad.
La filosofía de Confucio rebasó las fronteras chinas e influyó en el mundo cultural de Asia Oriental, incluida China Continental, Taiwán, Hong Kong, Macao, Corea, Japón, Vietnam y parte de Singapur.
Tan importante es el pensamiento de Confucio que, a fines del 2015, personalidades confucianas crearon una iglesia nacional confucianista en China.
En parte, la filosofía de Confucio se transmite a través de frases como las siguientes:
“Lo que quiere el sabio lo busca en sí mismo; el vulgo, lo busca en los demás”.
“Cuando el objetivo te parezca difícil, no cambies de objetivo; busca un nuevo camino para llegar a él”.
“Un hombre que no piensa y planifica su futuro encontrará problemas desde su propia puerta”.
“No te rindas nunca si quieres volver a casa”.
“Antes de embarcarte en un viaje de venganza, cava dos tumbas”.
“Podemos volvernos sabios a través de tres formas distintas: primero: a través de la reflexión, que es la más sabía. Segunda: por imitación, que es la más fácil. Y la tercera, por la experiencia, que es la más amarga”.
“El hombre que mueve montañas empieza moviendo pequeñas piedras”.
“Un viaje de mil millas comienza con un solo paso”.
“El que domina su cólera, domina a su peor enemigo”.
“El que todo lo juzga, encontrará la vida difícil”.
Estas y muchas frases más se encuentran en el documento o libro denominado Anécdotas de Confucio que es una colección de dichos e ideas recolectadas por seguidores de Confucio derivadas de charlas de Confucio y discusiones con sus discípulos. No son frases que tiendan a la salvación del alma, sino que representan sabiduría y acontecimientos; todo tendiente a examinarnos a nosotros mismos.
Nunca es tarde para hacerlo, podemos empezar al acabar de leer el pensamiento de Confucio: hoy.
Éxitos.