Anselmo Salvador Chávez Capó / Profesor Investigador de la UPAEP
Actualmente los precios del litro de gasolina, tanto de alto como del bajo octanaje, así como el diésel, están presentando un incremento acelerado, dando como resultado que son los más elevados de la historia, tanto en las ocho regiones en las que se divide la República para establecer su precio, como a nivel de promedio a nivel nacional.
Una manera de describir este incremento es analizar los factores que inciden en su precio.
En primera instancia, el precio del barril de petróleo que ha presentado un incremento acelerado en los últimos tres meses, que ha sido de 40.94%, así mismo el incremento en los recientes 30 días ha sido de 13.75%, lo cual impacta el costo de producción, que es el segundo factor, ya que de él se deriva el costo de la gasolina en la zona de Texas, de donde se adquiere este energético, el cual ha pasado de 60 centavos de dólar que equivalía a 12.90 el 4 de enero a 74 centavos de dólar el 8 de marzo de 2021, que en pesos mexicanos eran 15.97, resultando en un incremento de 23.79% en lo que va del año.
El tercer factor es el tipo de cambio, el cual ha sido presionado por la fortaleza del dólar en el mercado internacional, por lo que durante lo que va del año ha observado un incremento de 9.05% considerando el dólar interbancario, el cual pasó de 19.675 en los primeros días de enero, a 21.4485, el 8 de marzo.
El cuarto factor serían los impuestos, IEPS para la gasolina Magna es de 5.1148 por litro, mientras que para la premium es de 4.3192; en este orden de ideas, el Impuesto al Valor Agregado equivale a 16% del valor total.
El quinto factor son los costos de almacenamiento y distribución de la gasolina, que representa entre 10 y 15% del costo; y el sexto factor serían los márgenes de utilidad de los permisionarios, que dependiendo de la zona geográfica pueden tener una utilidad de 3.15 pesos por litro, al margen mínimo que es una utilidad de 16 centavos.
El incremento en el precio de gasolina impacta de manera directa a la inflación, de acuerdo a lo que señala el INEGI, que en febrero de 2021 el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) registró una inflación de 0.63% respecto al mes inmediato anterior; con este resultado la inflación anual se ubicó en 3.76%, lo cual se ve impulsado por el incremento en la gasolina de bajo octanaje que presentó un incremento mensual de 4.59%, con una incidencia mensual de 0.225%.
Por su parte, la gasolina de alto octanaje presentó un incremento mensual de 5.08%, con una incidencia mensual 0.225%, lo que ha llevado este indicador al rango superior que maneja Banco de México (Banxico) que es de 3% más o menos 1%.
En la presentación de Quién es quién en los precios de la gasolina, por parte de la Profeco, en la conferencia matutina del Ejecutivo federal del 8 de marzo de 2021, se reportó que el precio de la premium tenía un costo promedio de 21.52, la magna llegaba a los 20.24 y el diésel alcanzó los 21.20, todos precios por litro, por lo que el gobierno federal incrementó al ofrecer un descuento Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) para la gasolina magna de 37.90%, para la premium de 3.39% y para el diésel de 14.90%, su programa de subsidio con respecto a la semana anterior, para la semana del 6 al 12 de marzo de este año.
Estos precios alcanzan los niveles de 2017 debido a elementos de oferta y demanda que están afectando su precio, de esta manera el gobierno federal busca atenuar el impacto del incremento de la gasolina, aprovechemos ahora que es época electoral, porque después del mes de junio, el precio de estos energéticos podría quedar sin estímulos y entonces viviremos la realidad.
La gasolina no baja y sube por decreto, se mueve por condiciones de mercado, nosotros lo sabemos, ¿lo saben allá arriba?