Por: Cecy Rendón
Antes se pensaba que los hijos eran el único propósito del matrimonio; hoy eso ha cambiado y el tema es bastante más opcional. Lo que no ha cambiado es el costo energético y financiero que los hijos tienen.
Tener hijos es algo que requiere de muchísimo tiempo, energía y dinero. Tanto como si ya los tienes como si piensas tenerlos. Hacer un plan financiero para cada uno de ellos es indispensable si no quieres enloquecer y si quieres mantener unas finanzas sanas el resto de tu vida.
El formato de familia puede ser cualquiera que tu decidas o cualquiera que la vida te haya impuesto. Hoy en día existen una infinidad de formas de tener una familia, y, afortunadamente, vivimos en una época en la que cada vez más los formatos poco tradicionales son más y más aceptados.
Lo primero es tener claro que cada hijo que tengas requiere de tiempo y de energía, mismos que tendrás menos disponibles para trabajar y para producir dinero. Idealmente, tener hijos es algo que debería de planearse en un momento de la vida en el que haya tanto tiempo como energía disponibles… pero eso no siempre es posible, y a veces hay que reaccionar a situaciones no planeadas.
Lo segundo es el tema del dinero. Cada hijo implica gastos: desde las cosas más básicas, como alimentación y ropa, hasta gastos médicos, seguros y educación. Sin importar cuál sea tu filosofía personal y cómo decidas educarlos, te costará dinero.
Como todo lo que tiene que ver con dinero, el orden es la clave del éxito. Los seguros, tanto de gastos médicos, de vida, como los esquemas de ahorro a largo plazo para la universidad serán tus mejores amigos. Te recomiendo que busques a un experto en planeación financiera; no sólo a un vendedor de seguros, sino a alguien que te oriente y te ayude a trazar un plan que les funcione como familia.
Ajusta tus presupuestos y evita endeudarte. Un hijo no es algo que saldrá de tus responsabilidades en el corto plazo. Es mejor llevar un ritmo de vida moderado que acumular deudas que atenten contra la salud financiera de tu familia.
Como ya hemos platicado, demostrar cariño no es comprar lo más caro. La mejor forma de demostrar amor a tu pareja, familia e hijos es llevar un orden financiero que te permita vivir con paz mental.
Tener hijos es una de las grandes bendiciones que la vida te puede regalar, pero si no haces un plan financiero puedes complicarte mucho tanto tu vida como complicarles a ellos su futuro.
Planea, organiza y presupuesta a cada uno de tus hijos, los tengas o no en este momento.