En el verano de hace seis años, en los días de las sesiones de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, en la LXII Legislatura, ya con la salud recuperada y con nuevos bríos, el entonces senador perredista Miguel Barbosa Huerta encabezaba la oposición al entonces PRI-gobierno del peñismo.
Fueron días de debates duros, negociaciones apretadas, con el entonces coordinador del tricolor en el Senado de la República, el siempre enigmático Manlio Fabio Beltrones Rivera, “Don Beltrone”.
A pesar de que su bancada, el PRD, era entonces apenas la tercera minoría, el poblano empujó y consiguió la presidencia de la Cámara Alta, la que asumió el 1 de septiembre de 2014.
Hasta donde lo registra la memoria, ningún oriundo de Puebla había tenido esa responsabilidad.