Álvaro Ramírez Velasco
María Luisa Albores González, presidenta fundadora del Movimiento Regeneración Nacional (Morena) en Puebla y hoy titular de la Semarnat, en el gabinete del presidente Andrés Manuel López Obrador, sonríe con un muy tenue rubor cuando se le interroga sobre la posibilidad de que sea candidata a la gubernatura poblana en 2024.
A la pregunta específica de si “¿se descarta?”, contesta con un breve silencio que rompe con las frases: “Vamos a hacer trabajo. Seguimos haciendo el trabajo con el presidente. Los temas ambientales son muy ríspidos… estamos enfocados”.
La titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y antes –al principio del actual gobierno federal– secretaria de Bienestar, no tiene que andar presumiendo cercanía con el presidente de la República, ni debe llenar sus redes sociales de selfies con el tabasqueño.
Saben en todas las esferas que la chiapaneca-poblana, quien tiene oficialmente su residencia en Cuetzalan del Progreso, es de las personas más cercanas a Andrés y tiene toda la confianza en Palacio Nacional.
En entrevista, el jueves pasado –al terminar el desfile por la Batalla del 5 de Mayo de 1862–, María Luisa contesta asertiva sobre la definición que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) dio en 2021, para que también en las gubernaturas los partidos deban postular candidatos con base en la paridad de género: “Tiene que haber una participación con base en la equidad de género y que las mujeres participen. Vamos demostrando que las mujeres sí podemos hacer un buen trabajo”, dijo.
Con la mirada al retrovisor, sobre los días muy difíciles de la construcción del Movimiento Regeneración Nacional (Morena), cuando le tocó ser la primera presidenta del Comité Ejecutivo Estatal (CEE), los ojos le brillan y se le dibuja una sonrisa.
A diferencia de otros que sueñan con la postulación a la gubernatura por “dedo divino” y que recién se sumaron a Morena, ahora que está en el gobierno y en el poder, Albores González sabe lo que es tocar puertas, llevar los periódicos Regeneración mano por mano, rogar que la gente se sumara y hacer coperachas para mantener vivo el movimiento.
Sin embargo, es generosa y elude criticar a los nuevos dirigentes y personajes de Morena en Puebla, porque “en la construcción de un partido, quienes somos ciudadanas y ciudadanos y pertenecemos a ese partido, tenemos que cuidar al partido”.
En la charla breve, pero llena de revelaciones, la mujer que ha sido mencionada como posible candidata a la gubernatura destaca su amor por el estado.
“Lo amo, lo quiero mucho, le tengo mucho respeto, porque mi universidad ha sido la gente, las compañeras nahuas, totonacas, que me brindaron un espacio para hacer comunidad”, señala sobre su trabajo de décadas en la Sierra Norte poblana, donde comenzó hace bastante tiempo el camino del movimiento, mucho antes de que fuera partido.
—¿Cómo está Cuetzalan… prácticamente cada fin de semana está allí?
—Procuro estar muy de cerca en Cuetzalan, me gusta. Allí están mis hijos, a quienes amo. Procuro hacer base en Cuetzalan.
—Fue usted la primera presidenta de Morena en Puebla, ¿cómo fue esa experiencia, desde antes de ser partido?
—Sí, del Comité Ejecutivo Estatal (CEE). Fue una experiencia muy bonita, fui invitada por parte del presidente (Andrés Manuel López Obrador) a formar parte de Morena. Recuerden que era una asociación civil y me tocó trabajar en cuestiones del campo e indígena. Después empezamos a hacer la base de Morena, que no era fácil, porque no era conocido, empezamos a hacer un trabajo muy, muy fuerte. Luego tuve la oportunidad de formar parte del CEE como presidenta.
—¿Costó trabajo?
—Sí, al principio costó mucho trabajo –lo subraya alargando la palabra mucho–, ir a rogarles que formaran parte del comité, llevarles los periódicos Regeneración, estar tocando puertas y apelando a la conciencia. Y así empezamos. No era fácil, porque recuerden que no éramos partido y lo que hacía ese comité era cooperarnos, era trabajar, y con base en ello poder financiar el que pudiera estar el Comité Ejecutivo Estatal, tener nuestras reuniones y asambleas cada fin de semana, además de formar los comités municipales. Recuerden que formamos los comités municipales, que en ese tiempo había 216 municipios (en la estructura partidista), hoy hay 217, pero estamos hablando de un estado amplio. No era tan fácil.
—Les dejó muy adelantado el tema (a los morenistas poblanos de hoy), porque además a usted le toca la transición para convertirse en partido.
—Sí, hicimos la transición y algo que podemos decir que nos dio mucho gusto y mucho orgullo. No se sí recuerden ustedes, pero algunos estados no sacaron a la primera lo que es la votación de la asamblea. Debíamos tener, mínimo, 3 mil 300 votos y tuvimos 3 mil 800, aunque lo rasuró el INE (Instituto Nacional Electoral) en ese tiempo, porque recuerdo que habíamos rentado 7 mil sillas en el salón. Y aún así (con la rasurada) llegamos a 3 mil 800 y a la primera asamblea salió legitimado, por parte de la asamblea del estado de Puebla, que teníamos partido Morena.
—¿Cómo ve lo que han hecho algunos dirigentes que han pasado por Morena-Puebla, lo que han hecho con lo que usted construyó?
—Ha habido de todo, ¿no? Al fin de cuentas fue como un partido. Yo era de las que decía que se quede como movimiento, pues porque vengo del movimiento y de la lucha de defensa, pero creo que ahí va caminando.
—Dice el gobernador Miguel Barbosa, como dice el presidente, que aquí Morena va a ganar por paliza en 2024.
—Sí. Seguro que sí. Lo demostró este 10 de abril (en la Consulta Popular sobre Revocación de Mandato), donde la gente se desbordó en la votación.
—El TEPJF en 2021 estableció la paridad de género también para las gubernaturas, ¿usted cómo ve ese tema?
—Bien. Tiene que haber una participación con base en la equidad de género y que también las mujeres participen. Lo podemos demostrar en el sentido de lo que hace nuestro presidente. Él es el primero en este país que hace un gabinete paritario. Creo que poco a poco, con la responsabilidad, el trabajo y el compromiso, que vamos haciendo al nivel que nos pone cada dependencia y cada secretaría, pues vamos demostrando que sí podemos las mujeres hacer un buen trabajo.
—Hay quienes consideramos que es usted una posibilidad para Morena para la gubernatura de Puebla en 2024.
¿Qué dice usted?
—Pues vamos a hacer trabajo, seguimos haciendo el trabajo con el presidente.
—¿Se descarta? (Esta pregunta es respondida solamente con sonrisas. Luego de un breve silencio, María Luisa Albores trata de dar por terminada la entrevista, pero contesta).
—Estamos haciendo el trabajo con el presidente, ya ven que los temas ambientales son muy ríspidos. Traemos el tema Calica, el Tren Maya, son proyectos de nuestro presidente y haciendo equipo. Estamos enfocados en sacar el trabajo, porque no es fácil. Es dejar una base en cuestiones ambientales. Recuerden que todo lo ambiental tiene que ver con la soberanía y la defensa de nuestro país. Estoy hablando del territorio, estoy hablando de nuestra agua, de nuestra biodiversidad, estamos hablando de nuestro suelo, entonces yo creo que ahorita hay que enfocarse.
—¿Pero no quita la mirada de Puebla?
—Pues soy de aquí, Puebla, sigo teniendo esa cercanía. Es un estado que, como bien se sabe, lo amo, lo quiero mucho, le tengo mucho respeto, porque mi universidad ha sido la gente, las compañeras nahuas, totonacas, que me brindaron un espacio para hacer comunidad.