Por: Jorge Luis Hernández/ [email protected]
Ni más ni menos
PARA EMPEZAR
La “crónica de una salida anunciada”. Por supuesto que me refiero al tema de Guillermo “Billy” Álvarez y su renuncia a la dirección general de la Cooperativa Cruz Azul. La decisión del polémico directivo del equipo cementero era más que esperada, obvia y práctica para los momentos que atraviesa personalmente.
Hace unos días, la Liga MX fijó su postura acerca de lo que le está sucediendo al ahora expresidente del Cruz Azul, aclarando que no hay peligro de desafiliación para el club y todas sus categorías y ramas, por el hecho de que la investigación y orden de aprehensión son –palabras más, palabras menos– un tema personal de Guillermo Álvarez, como miembro de la cooperativa de la compañía cementera, que nada tiene que ver con su rol como dirigente de la escuadra.
Lo sé, fue un argumento lleno de contradicciones y pocos fundamentos si revisamos el reglamento de afiliados y Código de Ética de la Federación Mexicana de Futbol y la Liga MX.
Me dijo mi “antena”, en las oficinas de la liga, que esta medida no fue más que “ganar tiempo” y que en la Liga MX fueron muy claros con la gente del Cruz Azul: “saben que en este tema (el caso “Billy” Álvarez) todos perdemos, lo que significa Cruz Azul para la liga en temas de interés y promoción, además de la credibilidad y honorabilidad de los miembros de la liga, por eso, vamos a manejar una versión –la antes mencionada–, pero el señor Álvarez tiene que renunciar en lo que esto se soluciona, no le vemos de otra”, se dijo en la reunión en la que se definió el caso de Cruz Azul.
Inmediatamente, se dio a conocer la renuncia de Guillermo Álvarez y el “nuevo” organigrama de la Máquina Cementera, en el cual lo que se busca es ganar tiempo, ya que ahora sí las acusaciones hacia “Billy” son graves y le requerirán tiempo, dinero y esfuerzo y los “dueños del balón” en nuestro país no quisieron que la Liga MX fuera parte de este proceso judicial.
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SIGO CON
Los problemas a los que se está enfrentado la Liga de Balompié Mexicano para echar andar su primera temporada.
A pesar de que ya cuentan con 18 equipos para competencia y hay empresarios que siguen buscando un lugar en este circuito, el tema económico y logístico se ha convertido en la principal dificultad para llevarla acabo sin problema.
Resulta que en el tema de los gastos e ingresos hay una gran disparidad para los equipos, al no ser una liga posicionada y que por ahora vivirá a la “sombra” de la Liga MX, por lo que patrocinadores, televisoras y comercialización están dirigidos hacía la “MX”, en tanto que la del Balompié está “batallando” para animar a que inviertan gobiernos, empresarios y marcas y, en caso de hacerlo, por cantidades de dinero considerables.
“Sí le entran, pero al saber que no es la liga ya conocida, la tradicional se puede decir (Liga MX), pues simplemente entran con mucho menos, otros de plano dicen que no”, indicó un empresario que está buscando su afiliación a la Liga de Balompié Mexicano.
En el tema de las televisoras es el mismo, algunas ya están saturadas en cuanto a programación futbolera y obviamente siempre tendrán predilección por la Liga MX, por lo que el buscar los días y horarios idóneos está resultando ser toda una proeza. A eso hay que agregar –que con todo y tope salarial a los jugadores y cuerpos técnicos– las “cuentas” nada más no salen, al menos no a mediano y largo plazo.
Mientras no haya mejores ofertas de inversión en la Liga de Balompié, su viabilidad es poco probable, ya que en la marcha, temen sus directivos que muchos clubes comiencen a desertar por problemas financieros y entonces sí, sería el gran fracaso para todos.
TERMINO CON
Que conste que este tema me lo solicitaron, se llama el “Puebla de Reynoso”, el cual está invicto en el recién iniciado Torneo Guard1anes 2020 de la Liga BBVA MX, con un triunfo por goleada ante Mazatlán y un empate ante Cruz Azul.
Hasta ahí todo bien, pero la forma en que juega el equipo no es del agrado de muchos aficionados y compañeros de los medios. A ellos les digo, en cada partido del Puebla no habrá más que el “Reynoso Style”. La Franja no se saldrá de su guion, del esquema de juego y aquél o aquéllos que se atrevan a hacerlo, irán a la banca o no serán ni concentrados.
Está claro, el entrenador peruano parte de un orden de “no recibir gol”, estar bien parados atrás, con una media cancha que contiene más de lo que crea, ya que la labor de atacar, pasará por los extremos, de lo que puedan hacer y generar, de las jugadas a balón parado y los contragolpes que siempre buscarán por las bandas.
Fíjese bien en el próximo partido del Puebla, la media cancha está para contener, sí, ocho y hasta nueve jugadores –según el parado del equipo– estarán para evitar el gol en contra.
¿Sabe qué?, se vale, le ha funcionado y así seguirá, algunos días le saldrá, otros no, todo depende de la efectividad de los atacantes poblanos, porque este Puebla será un equipo que no llegará mucho al área rival a través de jugadas armadas, pero cuando lo haga, tendrá que ser gol para poder “manejar” el partido al puro “Reynoso Style”, porque cuando la Franja empiece perdiendo –acuérdese de mí– entonces sí, quien sabe cómo le va a ir al Puebla, lo más seguro es que esté más preocupado en no recibir más goles que en empatar.
Así lo marca el libro de los entrenadores que juegan a sacar un punto al menos, sin cambios “atrevidos” o indicaciones “arrojadas”. Insisto, a muchos no les gustará –me incluyo–, pero a eso jugará el Puebla de Reynoso.
¿El Puebla tiene plantel para jugar diferente? Sí, y lo podría hacer bien, tiene jugadores dotados en media cancha, pero Juan Reynoso es el entrenador y como la mayoría de técnicos: se la “jugará con la suya” siempre, así que, no, el Puebla no va a cambiar su estilo de juego, ya sea en el Cuauhtémoc o cualquier otra cancha.