Mariana Flores
Artículos que no son considerados armas de fuego, como las pistolas de postas o de aire comprimido, son cada vez más usadas en comisión de delitos como robos, asaltos y secuestros, ante la falta de regulación en su venta.
Así lo sentenció un expolicía de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) de la ciudad de Puebla, quien solicitó la gracia del anonimato.
El antiguo servidor público indicó que, en su experiencia en casi una década de labor , de cada 10 detenidos seis portaban armas simuladas para delinquir.
Señaló que aquellas que simulan ser armas de fuego constituyen el delito de Portación de Objeto Prohibido cuando se usan para cometer un delito.
De acuerdo con el artículo 179 del Código Penal Puebla, son armas e instrumentos prohibidos los puñales, verduguillos y demás armas similares ocultas o disimuladas en bastones u otros objetos; también las manoplas, macanas, chacos, hondas, correas con balas, pesas o puntas; las bombas, aparatos explosivos o de gases asfixiantes o tóxicos; ganzúas y llaves falsas.
DETENCIÓN POR PORTACIÓN
uando una persona es sorprendida con uno de estos objetos, las autoridades de seguridad municipal, estatal y federal pueden proceder a detenerla y remitirla a la fiscalía correspondiente.
El expolicía abundó que era común que los detenidos tuvieran antecedentes penales, y era entonces cuando se consideraba legal su detención.
ARTEFACTOS SIMILARES
Alfredo Gómez, quien atiende una tienda de artículos militares, dijo que, pese a que las tiendas requieren permisos para vender objetos que no son armas de fuego, las personas no requieren permiso para comprarlos.
“Lo que más vendemos son aparatos de electrochoques y de aire comprimido. Son muy similares a las armas de fuego, aunque traen una marca regularmente de color naranja”, narró.
Enfatizó que, pese a que hace un año sí solicitaba constancia de pertenecer a alguna corporación de seguridad, la llegada de espacios como gotcha provocó que dejaran de solicitarlas.
“Nos topamos con mucha gente que comenzó a jugar con estos artículos y, además, mujeres que buscan objetos para defenderse”, dijo.
El Código Penal de Puebla no considera armas o instrumentos prohibidos los rociadores, gasificadores y dosificadores de sustancias químicas que produzcan efectos pasajeros en el organismo humano sin llegar a provocar la pérdida del conocimiento.
PROTECCIÓN, INDISPENSABLE
Respecto a las lesiones que pueden provocar estos artículos, el médico general Daniel Galicia explicó que van desde moretones hasta pérdida de movimiento.
“Un golpe de este tipo de artefactos puede provocar rasguños en un ojo, dislocación de lentes, ceguera, acumulación de sangre o hasta un golpe en un nervio que pueda ocasionar lesiones severas en el funcionamiento de un miembro”, dijo.
En entrevista dijo que para el uso recreativo de pistolas de aire o de postas, los usuarios deben protegerse para evitar lesiones.
Al final remarcó que el uso de estos artefactos no es recomendado para menores de edad.