Diana López Silva
Familias que quedaron en extrema pobreza desde que la tormenta Earl las dejó sin vivienda en 2016 recibirán una casa este 2023, con el apoyo de la Fundación Empresarios por Puebla, del Consejo Coordinador Empresarial (CCE).
Así lo anunció en entrevista María Rivera Castillo, presidente del Patronato de la Fundación, quien adelantó que está previsto iniciar a mediados de año la construcción de cinco casas para damnificados de los deslaves provocados por fenómenos meteorológicos que han afectado la Sierra Norte de Puebla.
Detalló que primero hicieron la selección de las familias que serán beneficiadas con una casa nueva, que perdieron su patrimonio por las lluvias de la tormenta Earl en 2016, que además de daños materiales provocó la muerte de 52 personas, de las cuales 38 eran de Puebla y el resto de Veracruz e Hidalgo.
CASAS DECOROSAS
Rivera Castillo recordó que las familias quedaron sin casa por un deslave en el municipio de Jaltepec, Huauchinango.
Adelantó que la fundación ya cuenta con el terreno para llevar a cabo las obras y se encuentra en la recaudación de fondos para iniciar la construcción en próximos meses.
En cuanto a las características que tendrán las casas, adelantó que se trata de viviendas con sala-comedor, cocina, recámaras y un patio para que las familias puedan tener animales de crianza.
CONCIERTO CON CAUSA
Destacó que esta labor altruista será posible con el apoyo de todos los sectores del Consejo Coordinador Empresarial, así como de la sociedad de Puebla.
Explicó que se ultiman detalles y se hacen las gestiones necesarias para organizar eventos a beneficio, para recabar fondos para este proyecto.
“Se recaban recursos a través de eventos y cenas que vamos a hacer, y también un concierto para obtener fondos”, dijo.
Confió en que este proyecto pueda ser llevado a cabo conforme a los planes, para que las familias puedan recibir su casa nueva este año, a siete años de la tragedia.
EL MUNICIPIO MÁS AFECTADO
En agosto de 2016 los remanentes de la tormenta Earl dejaron 52 muertos en los estados de Puebla, Veracruz e Hidalgo, 10 desaparecidos y más de mil 600 viviendas afectadas, de las cuales 700 fueron registradas como pérdida total, por lo que la Secretaría de Gobernación federal declaró zona de emergencia.
Tan sólo en la cabecera municipal de Huauchinango se registraron deslaves sobre viviendas en las colonias La Joya, Guadalupe, Aurora y La Cumbre, que causaron el fallecimiento de 13 personas: siete menores y seis adultos, y un adulto falleció en la la carretera.
En Xaltepec, junta auxiliar del municipio de Huauchinango, se desgajó un cerro sobre la comunidad, lo que causó la muerte de 11 personas: ocho menores y tres adultos. Además, en el municipio de Tlaola se reportaron tres decesos por deslaves sobre viviendas.
De acuerdo con los reportes del gobierno estatal de Puebla, en aquel momento encabezado por Rafael Moreno Valle Rosas, en Huauchinango se presentó la mayor precipitación de agua de la que se tenía registro, 265.5 milímetros acumulados en 24 horas; es decir, casi la totalidad de lluvias de todo un mes en una sola noche.
También en agosto, pero de 2021, Huauchinango fue golpeado nuevamente por las lluvias, ahora del huracán Grace, que dejó saldo de un muerto, inundaciones y deslaves.
María Rivera confió en qué haya la suficiente participación de la sociedad poblana para hacer realidad estas cinco casas para las familias damnificadas por los fenómenos meteorológicos que destruyeron sus viviendas.