@cyberthompson
En Puebla tenemos la fortuna de tener excelentes universidades, una de la cuales es la UDLAP, por cierto, fue recientemente reconocida como la mejor institución privada en educación superior en el país, además de estar rankeada a nivel mundial como una de las mejores en América Latina, en el campo atlético y deportes los equipos son dominantes casi siempre entre los primeros lugares y aunado a lo anterior la institución es uno de los referentes culturales más importante del Estado de Puebla.
El miércoles 30 de junio empezaría a dar dos laboratorios en la UDLAP, uno de ciberseguridad y otro de tecnologías de la información ya en el campus, mismos que tras la invasión y desalojo de fuerzas públicas armadas ya no pude impartir.
Como director general de Tecnologías de la Información de la institución, tengo hoy Consejos a los cuales reporto: Académico, Administrativo y Empresarial, así como al hoy patronato legalmente constituido en términos de ley que es el Patronato de la Fundación Jenkins. Yo soy un ingeniero productivo dedicado a las tecnologías, telecomunicaciones, innovación y ciberseguridad, el prestigio de la institución y en lo personal el de un servidor en el ramo de las tecnologías hablan por sí solos.
Amo a mi país y me apasiona mi trabajo, detesto las grillas, las transas y las peleas. Desde que inició el confinamiento por la contingencia del Covid en marzo de 2020, el 100% de las clases, seminarios, actividades culturales y deportivas se dieron en línea; las plataformas utilizadas y habilitar que estudiantes, profesores y empleados pudieran continuar con sus actividades desde su casa ha sido y es responsabilidad del equipo de trabajo a mi cargo.
Todas la tecnologías, soporte técnico y seguridad son brindadas por un equipo de profesionales dedicados y enfocados a hacer de forma excelente las cosas que nos corresponden. Desde el día uno del confinamiento, exámenes de admisión, clases, libros digitales, software académico, laboratorios con multimedia, sistemas contables, nómina, médicos, en fin, toda la operación ha funcionado perfectamente al día de hoy.
Lamento mucho en lo personal el malestar que hoy atravesamos los miembros de la comunidad UDLAP, generando una indefinición que no tiene que ver nada con el objeto de la institución que ha sido durante 81 años preparar a miles de profesionistas.
La ocupación del campus por fuerzas armadas policiales se da por diversos procesos jurídicos en trámite y que definirán quiénes son los miembros patronos del Patronato de la Universidad; ahora bien, se supone que todavía vivimos en un país democrático y de instituciones, tengo fe en que esto se resuelva no por intereses o la influencia de grupos de poder y políticos, sino de una forma justa y legal.
Espero que esto se resuelva y termine de la mejor forma para seguir el rumbo que tenía la institución. Es absurdo e innecesario que haya policías armados dentro del campus cuando hay verdaderos problemas de seguridad en el Estado en los que se debieran ocupar para acabar con el crimen. Como miembro de la comunidad espero poder seguir dando clases y trabajando en uno de los campus universitarios más hermosos de América Latina.