Dr. Anselmo Salvador Chávez Capó / Profesor Investigador de la UPAEP
Como es del conocimiento de todo el mundo, los proyectos prioritarios de gobierno son el Aeropuerto Felipe Ángeles ya inaugurado, pero sin alcanzar una función operativa rentable aún; el Tren Maya, cuya finalización se tiene programada para diciembre de 2023 y que aún tiene que librar muchos obstáculos para su finalización; el Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec (CIIT), el cual presenta retos de trazado así como logísticos; el aeropuerto de Tulum, que se pretende que esté funcionando a finales de 2023, y la Refinería de Dos Bocas u Olmeca, inaugurada el pasado fin de semana, para conmemorar el cuarto año del triunfo electoral del gobierno actual.
En esa Refinería de Dos Bocas están sustentadas la mayoría de las esperanzas para contar con una independencia energética en materia de combustibles como la gasolina y el diésel, cuya inversión presupuestal, de acuerdo con las cifras iniciales, no debería costar más de 8 mil millones de dólares, sin embargo el costo actual ya se acerca a los 18 mil millones de dólares.
¿Cómo llegamos a este día en su avance y cuál es el estado presupuestal que guarda esta inversión? A continuación, se presentan algunos datos en relación con este proyecto:
• Se debe considerar que no es una inauguración como tal, ya que únicamente se realizarán pruebas de arranque, toda vez que aún está llegando equipo para su construcción y se ha intensificado el arribo de equipo por vía marítima al puerto de Dos Bocas, el cual se descarga y envía inmediatamente a la refinería Olmeca para su instalación. Apenas la semana pasada se recibieron reactores para hidrotratamiento y guardas azufre y la columna principal de la planta catalítica fabricada en Turquía y actualmente están en proceso de instalación.
• De acuerdo con Reuters referenciando a fuentes ligadas a la Secretaría de Energía, se ha estimado que la refinería opere a fines del 2025 o hasta entrado el 2026 a un 80%, considerando que la construcción promedio de una refinería es de entre seis y siete años.
• La Secretaría de Energía, que encabeza Rocío Nahle, estima que en 2023 la refinería recibirá para su producción 240 mil barriles diarios de crudo y llegará a 267 mil barriles en 2025.
• Hacia 2026, alcanzará los 340 mil barriles diarios, lo que implicaría una utilización de 80% de la obra,
• El presidente señala que espera llevar la capacidad conjunta de refinación de Pemex a entre 1.8 y 2.0 millones de barriles por día, contando las seis refinerías actuales en el país, más Olmeca, y la de Deer Park, en Texas, y cesar las exportaciones de crudo para procesar todo lo que se requiere en casa. Se debe considerar que la meta podría estar lejos, porque según cifras de la propia Pemex, las seis refinerías locales procesaron en los primeros cinco meses del 2022 un promedio de 828 mil 493 barriles diarios, casi un 52% de su capacidad conjunta.
• La inversión prevista fue de alrededor de 160 mil millones de pesos (8 mil millones de dólares), sin embargo el presidente López Obrador ha reconocido un sobrecosto de entre 3 y 4 mil millones de dólares, lo que representa un incremento de entre 38 y 50 por ciento respecto a lo estipulado en el presupuesto original. Como ya se señaló, existe la posibilidad de que su costo llegue a los 18 mil millones de dólares.
Estamos otra vez en una situación en la cual el gobierno actual da muestra de su enorme incapacidad para planear, ejecutar y concluir cualquier proyecto, considerando que la refinería se ha desarrollado con una planeación inadecuada, se ha hecho un uso ineficiente de recursos públicos y en un contexto de opacidad que ponen en duda su viabilidad.
Son los problemas de hacer los planes en las rodillas, sin un sustento técnico, pero, eso sí, con una enorme terquedad.