@cyberthompson
Sin lugar a dudas, el 2021 fue un año lleno de retos en muchos sentidos y las empresas de todo el mundo tuvieron que enfrentar un sinnúmero de amenazas cibernéticas. El panorama del próximo año no parece alentador desde el punto de vista de la seguridad informática, siento que el 2022 será un año donde veremos nuevas brechas masivas de seguridad y miles de negocios afectados.
En la colaboración de hoy te hablaré del escenario en seguridad informática para el próximo año:
- Ciberataques dirigidos a las cadenas de suministro: Desgraciadamente los ataques a las cadenas de suministro se volverán más comunes y los gobiernos deberán establecer regulaciones para enfrentar estos ataques y proteger a las redes empresariales. Estos escenarios podrían poner en riesgo a mercados enteros si es que las compañías atacadas no pueden recuperarse de manera inmediata.
- Mayores amenazas a servicios empresariales en la nube: En un 2022 donde el trabajo híbrido será la norma para muchas empresas, la adopción de servicios en la nube continuará siendo fundamental para la continuidad de miles de negocios. Desde que inició la pandemia se aceleró el proceso de transmisión hacia este tipo de servicios, sin embargo, la rápida migración a este formato trae consigo varios retos y amenazas de seguridad, por ejemplo, almacenamientos mal configurados, la reducción del control y la falta de visibilidad entre muchos otros temas. Dado este escenario, será muy importante que los negocios pongan especial atención para proteger los servicios en la nube.
- Mayor adopción de soluciones de seguridad basadas en Inteligencia Artificial: El avance tecnológico está aumentando nuestra capacidad de detectar amenazas a través del uso de soluciones automatizadas. Debido a la complejidad de los ataques, cada vez es más difícil monitorear, prevenir y responder dependiendo exclusivamente de las habilidades del personal de seguridad informática. Las empresas de todo el mundo, invertirán cada vez más en soluciones basadas en inteligencia artificial para hacer frente a los nuevos riesgos.
- Las filtraciones de datos son de mayor escala y más costosas: las filtraciones de datos se producirán con mayor frecuencia y a mayor escala, y su recuperación costará más a las empresas y a los gobiernos. A la par de estas tendencias, veremos nuevos récords de pagos que realicen las compañías por evitar que su información se haga pública. No sólo veremos motivos económicos para las filtraciones de datos sino también por temas políticos.
- El ransomware y el ciberterrorismo seguirán aumentando: Los ataques de ransomware (malware de rescate) seguirán creciendo a pesar de los esfuerzos de los equipos de seguridad informática por detener estos ataques. Los actores de amenazas se centrarán en empresas que puedan pagar un rescate y los ataques se volverán cada vez más sofisticados. A medida que crece la popularidad de este método, los atacantes lo utilizarán para llevar a cabo ataques de filtración y extorsión de datos.
Me gustaría que todas estas predicciones no se convirtieran en realidad, pero el escenario de seguridad informática para 2022 no es muy alentador.
Las empresas, instituciones educativas, de investigación y de gobierno, no tienen otra opción que estar preparados de la mejor manera posible para hacer frente a todas estas amenazas que cada vez cobran más fuerza y no tardan en hacerse realidad.